El arroz a la sitgetana es el plato más representativo de la cocina de La Nansa, un local familiar de Sitges a cuyo frente ya han estado cinco generaciones. 

El Rossegall un espacio familiar y agradable. Su carta, muy completa, recoge la materia prima que llega del mar con productos y propuestas como el tornillo de pinchos, los chipirones, gambas y cigalas típicas de Vilanova, el bull de atún, el ajo quemado, el pez de plata o la sepia a la bruta.

El Palau Vell es toda una institución: se trata tanto del lugar de reunión de cicloturistas por las mañanas, como del punto de encuentro para organizar celebraciones y comidas de negocios, todo gracias a su ubicación, muy cerca de un polígono industrial.

Con sabor italiano en sus inicios, hoy en día presenta una propuesta de cocina marinera y del país. El local, situado en un bello paraje sobre el mar, destaca también por ofrecer especialidades de pastelería de elaboración propia.

El restaurante del Hotel Robert está especialitzado en platos de la cocina tradicional catalana como, por ejemplo, pato con nabos o las cebollas rellenas del Anoia. Es un edificio de principios de siglo, reformado en 1994, que mantiene el estilo clásico tradicional, con un ambiente muy acogedor.

Elegancia y presentación se dan la mano para acompañar la cocina de El Cingle, de Montse Estruch, un restaurante que combina los productos de temporada con deliciosos sabores exóticos. Cuenta con una gran variedad de propuestas y diferentes líneas, desde la más informal a una más lujosa, una carta de vinos y aguas muy completa y un comedor amplio y moderno.

El Cau del Vinyet es acogedor y ofrece una cocina de mercado más que correcta con platos muy destacados. El establecimiento dispone de terraza y, además, de un salón para todo tipo de celebraciones.

Un lugar con historia se convierte en un espacio acogedor para deleitarse con lo mejor de la comida catalana.

En el restaurante Ca l'Ignasi se puede disfrutar de una cocina tradicional catalana, elaborada con productos ecológicos, de temporada y provenientes de productores locales. 

Este restaurante, uno de los más emblemáticos de Sant Sadurní d'Anoia, ofrece cocina catalana que combina la tradición con las nuevas tendencias y dispone de más de 120 cavas elaborados en la localidad entre los que escoger.