Cinco castillos con leyendas en las comarcas de Barcelona

A todos nos gusta visitar un castillo, pero si éste además tiene una leyenda, la experiencia todavía es más completa. En las comarcas de Barcelona hay una gran cantidad de fortalezas con alguna historia escondida entre sus paredes: relatos sobre princesas y bandoleros, animales que hacen huir a un gran ejército o leyendas sobre brujas malvadas... Si tienes curiosidad, presta atención porque después de leer estas historias querrás visitar los escenarios en los que dicen que una vez, hace muchos, muchos años, sucedieron de verdad.

1. Las brujas del castillo de Burriac

 La leyenda nos cuenta que el castillo de Burriac, en Cabrera de Mar (Maresme), vivió un momento de esplendor en plena Edad Media. Caballeros y trovadores de todos los lugares acudían a visitarlo y rendir pleitesía a sus señores. Pero con el tiempo fue abandonado. Las alimañas poblaron sus murallas y estancias. Hasta que un día los habitantes de Burriac se dieron cuenta que los sábados, cuando se ponía el sol, comenzaban a suceder hechos muy extraños

Los campos quedaban arrasados por repentinas tormentas, los rayos mataban al ganado o incluso el mar se embravecía y lanzaba grandes olas contra los pescadores. Una parte de los vecinos culpó de estas desgracias a cuatro brujas que, según decían, habían hecho del castillo su refugio. Su maldad era tal que el propio Diablo les tenía miedo. Otra parte de los habitantes no creía estas historias sobrenaturales. 

Entre incrédulos, un joven dijo que él iría al castillo el siguiente sábado y demostraría que todo eran supersticiones. Para su sorpresa, se encontró a las brujas junto a un caldero en pleno ritual. Ellas lo descubrieron y lo comenzaron a apalear hasta que quedó inconsciente. Al día siguiente, se despertó magullado y huyó a su casa haciéndose la promesa de que nunca más seria una persona curiosa. Otra leyenda nos habla de un tesoro que ocultó un bandolero antes de ser capturado por los hombres del rey. Aunque varias personas lo han buscado durante siglos, nunca nadie ha dado con el botín. Quien sabe… si decides visitarlo, quizá lo encuentres tú.

Informació pràctica: la visita del castillo de Burriac es una excelente opción para los amantes del senderismo. Hay rutas que salen de la misma Cabrera de Mar o también se puede completar con una caminada por el Parc de la Serralada Litoral.

2. Un bandolero en el castillo de la Roca 

Esta fortificación del Vallès Oriental nos trae una historia de nobles y bandoleros. El hijo pequeño de los señores del castillo desapareció un día cuando estaba en la cuna. Todo el mundo culpó a una antigua pareja de sirvientes, famosos por haber traído todo tipo de desgracias a la zona. El pequeño era reconocible porque le faltaba media oreja. Pese a que se enviaron a muchos soldados a buscarlo, jamás se encontró. 

Con el paso de los años, una nueva tragedia se cernió sobre la Roca del Vallès. Un grupo de bandoleros atemorizó aquellas tierras. Los mandaba un tal capitán Testafort. Nadie podía dominarlos y la señora del castillo (la madre del niño secuestrado) pidió ayuda a nobles cercanos que enviaron soldados y caballeros. Los bandidos eran tan audaces que una noche se atrevieron a asaltar el castillo y muchos fueron capturados, entre ellos el temido líder. 

Cuando fue llevado en presencia de la señora, ella comprobó que le faltaba media oreja y reconoció a su hijo. La mujer le explicó a Testafort sus verdaderos orígenes y este quiso enmendar la vida de criminal a que lo había abocado la pareja de malhechores que lo crió. De temido bandolero, pasó a ser un justo señor del Castillo de la Roca.

Información práctica: el castillo de la Roca es privado y no se puede visitar, pero en los alrededores hay interesantes rutas senderistas como las que se pueden hacer alrededor Santa Agnès de Malanyanes (alguna muy asequible para toda la familia).

3. Una historia de amor en la Torre de la Minyona  

El castillo de Cardona (Bages) tiene una historia como último baluarte austracista de la Guerra de Sucesión muy conocida. Pero su historia se remonta al siglo IX y, como no podía ser de otra manera, en uno de los baluartes más famosos de Cataluña, que también tiene su leyenda. Se vincula a una de las partes más antiguas de la fortaleza que aún puede verse hoy: la Torre de la Minyona

La leyenda nos dice que el duque de Cardona invitó al castillo a un príncipe musulmán, Abdalá, parar firmar la paz en la frontera. Durante la visita, el invitado conoció a Adales, la hija del anfitrión. Ambos se enamoraron, pero cuando el padre de la joven descubrió la relación decidió cortar de raíz

El duque de Cardona (Bages) declaró la guerra al joven príncipe musulmán. Mientras que encerró a Adalés en una de las torres de su castillo. Aislada de cualquier contacto humano, la joven acabó muriendo de pena. Su padre descubrió el cadáver cuando quiso perdonarla. Desde entonces, se dice que cada medianoche aún se escucha al joven Abdalá llegar con su caballo buscando a su amada

Información práctica: una buena manera de conocer de primera mano esta leyenda es acudir a la representación teatralizada: "La verdadera historia de la Torre de la Minyona" para completar tu visita al castillo de Cardona.

4. Los bueyes del castillo de Claramunt

Asustar a un enemigo más fuerte con ingenio es un tema recurrente en muchos relatos populares (solo hay que recordar al tamborilero del Bruc). La Edad Media también es rica en este tipo de historias y una de ellas la encontramos en el castillo de Claramunt (L’Anoia). 

A inicios de la época medieval, los sarracenos atacaron la comarca y pusieron sitio al castillo. Pese a encontrarse con un invasor muy poderoso, los vecinos de la Pobla de Claramunt decidieron plantar cara y recurrieron a San Procopio, patrón de localidad. ¿Pero como derrotar a un ejército más numeroso?

San Procopio reunió un rebaño de bueyes y les ató antorchas en sus cuernos. El santo y los vecinos esperaron a la medianoche y enviaron a los animales hacia los invasores. Estos al ver la columna de llamas en la oscuridad, pensaron que era un ejército muy numeroso que venía a ayudar a los defensores del castillo de Claramunt y decidieron retirarse. 

Información práctica: la fortaleza de Claramunt se puede visitar como parte de la ruta de los castillos de Frontera, una buena manera de conocer los baluartes que estaban en la antigua frontera de los condados catalanes. 

5. La cueva y pasadizos secretos en el castillo de Mediona y Olérdola

Tesoros y seres encantados tampoco pueden faltar en cualquier fortaleza que quiera tener una buena leyenda. En el castillo de Mediona (L'Anoia) encontramos una historia que además añade una cueva para tener la mezcla perfecta de misterio y tradición: una reina es víctima de un hechizo que solo se puede deshacer de una determinada manera. Si te ha llamado la atención, solo tenéis que leer algo más.

Esta leyenda nos habla de una cueva cerca del castillo. Allá vive una antigua reina que sufrió un hechizo muchos años atrás. Se decía que con ella había un gran tesoro. Quién fuera capaz de deshacer el encantamiento en la medianoche de Navidad se podría quedar esta fortuna y casarse con la monarca. El problema era que nadie conseguía llegar hasta donde ella estaba. La oscuridad de la caverna hacía huir hasta los más valientes.

Las leyendas de cuevas y castillos son habituales en muchas comarcas barcelonesas. Del castillo de Olèrdola (Alt Penedès) se dijo que tenía galerías subterráneas que llegaban hasta las playas del Garraf. Las historias antiguas también decían que la fortaleza nunca pudo ser conquistada, puesto que los defensores siempre conseguían alimentos y ayudas gracias a estas rutas secretas. Asimismo, encontramos una historia de amor, de dos jóvenes que se disputaron el amor de una chica, intentando llevarle una joya de las que se encontraban en estas cavernas, pero se encontraron con un terrible hechizo que transformó en piedra al más atrevido de los dos.

Información práctica: la visita en el castillo de Mediona se puede complementar con una ruta de senderismo o incluso practicar la escalada. Mientras que quien quiera ir Olèrdola puede hacer un recorrido de dos horas por las montañas próximas.


Más información:

Castillo de Burriac
Ruta de senderismo a Cabrera de Mar
Turismo en la Roca del Vallès
Ruta senderista por la Roca del Vallès
Castillo de Cardona
Visita teatralizada: "La verdadera historia de la Torre de la Minyona"
Castillo de Claramunt
Ruta de los Castillos de Frontera
Castillo de Mediona
Ruta circular en la montaña de Sant Miquel d'Olèrdola