El restaurante El Farcell de Mataró prepara algunas de las recetas más tradicionales de la cocina catalana de manera casera, en horno de leña, sin pretensiones ni florituras. Todas, con productos locales y de proximidad, de calidad y de temporada.

En el puerto de Premià de Mar se esconde un pequeño restaurante japonés con toques mediterráneos. Offu Sushi Bar ofrece a los comensales una propuesta diferente y especial de la gastronomía japonesa, con una ligera fusión con otras cocinas del mundo.

El restaurante Can Parral es lugar de encuentro en el pueblo de Dosrius. Este establecimiento tradicional sirve una amplia oferta de recetas típicas de la cocina catalana, muy caseras, en un local familiar, con una terraza agradable y un ambiente amigable.

Con más de cien años de historia en Sant Cebrià de Vallalta, Can Martri es un gran negocio familiar que incluye un bar-restaurante, una carnicería y un asador. Todos los productos cárnicos que sirven son de elaboración propia y su cocina es tradicional y muy casera.

Al Celler de l'Abril se puede ir a tomar unas tapas, una copa de vino o un aperitivo, en un local familiar y juvenil. El buen ambiente y el trato amigable de su personal hace que sea frecuentado por los vecinos de Canet de Mar.

The Drunken Duck es un pub inglés ubicado en el centro de Santa Susanna. Este bar es el lugar ideal para tomar una pinta y probar algunas de las especialidades de la cocina británica, en un local muy decorado y con un ambiente amigable.

Banys Lluís es un chiringuito tradicional con décadas de experiencia en la playa del Morer de Sant Pol de Mar. De decoración marinera y especializado en pescado y arroces, ofrece comidas en una ubicación inmejorable con vistas al Mediterráneo.

El Gourmand es un pequeño establecimiento ubicado en el centro de Mataró donde cuidan cada detalle de su cocina y del entorno donde la sirven: una gastronomía mediterránea de mercado y de autor, elaborada con productos frescos y servida por un personal atento.

En La Marineta hacen alta cocina muy creativa. El chef Pere Patuel cambió los fogones de Ramon Freixa en Madrid por los de este establecimiento, su proyecto personal. El resultado es un local pequeño y familiar donde deleita a los comensales con una carta llena de sorpresas.

Una casa centenaria en el centro histórico y modernista de Canet de Mar aloja al Gatzara, un restaurante tradicional y familiar que sirve cocina tradicional catalana y recetas caseras, elaboradas con productos de proximidad y de temporada.